miércoles, 23 de diciembre de 2015

ELECCIONES GENERALES 20-D: DE MÁXIMA ESTABILIDAD POLÍTICA A MÁXIMA INESTABILIDAD.

Como era de esperar, como consecuencia de los resultados de las elecciones generales del  20-D, España ha entrado en una situación de difícil gobernabilidad y elevada inestabilidad política. Lo más relevante de las pasadas elecciones generales es que el mapa político español se ha fraccionado mucho, pero la participación no ha crecido de forma notable, siendo todavía inferior a la que, por ejemplo, hubo en las generales del 2008 (73,85%). Los denominados partidos emergentes han crecido mucho, de la nada han pasado a tener 109 diputados, el 34,59% de los votos emitidos, pero no han logrado superar a lo que se conoce como bipartidismo, PP y PSOE, que ha obtenido el 50,73% de los votos. Los emergentes no podrán, ni separados ni juntos,  constituir gobierno sin contar con el apoyo de alguno  de los partidos que hasta ahora han gobernado España, PP y PSOE. Debo de reconocer que me ha gustado el resultado de Podemos, 69 diputados, como un mal menor, pues si Podemos y sus diferentes marcas hubieran logrado posicionarse como segunda fuerza política, creo que lo tendrían fácil para formar gobierno y por tanto  las consecuencias para España, para la economía, para la bolsa, para el empleo, etc., serían muy negativas. Es evidente, que con los resultados del 20-D España ha pasado de una situación de máxima estabilidad política a otra de máxima inestabilidad.

 

Las alternativas de Gobierno que en este momento hay en España, son muchas y todas muy difíciles de lograr. Los partidos emergentes han entrado en el mapa político español para dificultar la gobernanza de España, fraccionando la constitución del Congreso de los Diputados, buscando así chantajear a las mayorías imponiendo sus intereses. Intereses  confusos, cambiantes y todavía minoritarios en la sociedad española. Los resultados de las elecciones del 20-D conducen a hacerse tres importantes preguntas: ¿Qué ha provocado el debilitamiento del bipartidismo y favorecido el crecimiento de los emergentes? ¿El actual mapa político español es algo temporal o pasara a ser algo habitual de la política española? ¿Qué alternativa de gobierno aportaría mayor estabilidad política a España?

 

¿Qué ha provocado el debilitamiento del bipartidismo y favorecido el crecimiento de los emergentes? No lo sé, habría que preguntárselo a cada votante, a algunos incluso interrogarlos para logar saberlo. ¿Quién puede creer que Podemos o Ciudadanos van a poder solucionar los principales problemas de la sociedad española? Hay que ser ingenuo o muy ignorante para creer que un partido como Podemos, un instrumento al servicio de comunismo internacional en España, va a poder resolver alguno los problemas más importantes que afectan a los ciudadanos. ¿Por qué entonces más de 5 millones de ciudadanos han votado a Podemos? Ciudadanos es un partido  de niños ricos e ideología liberal. Ciudadanos defensor  de un liberalismo político partidario de cosas como “El menor Estado necesario para defender los intereses de la burguesía  al menor coste posible”, ha bebido votos de un partido como el PSOE, ha obtenido votos de sectores de la sociedad española tradicionalmente votantes del PSOE y cuyos intereses se verían afectados de forma negativa por aquello que defiende Ciudadanos en el caso de que llegara  a gobernar.  ¿Qué ha ocurrido? ¿No saben a quién votan los ciudadanos españoles? En mi opinión el crecimiento de los emergentes se debe a dos causas principales. Primera, la elevada corrupción en la derecha política española. Corruptos sectores de la derecha burguesa española  con vínculos con el comunismo internacional,  han realizado una operación política, que comenzó con el 15-M, para favorecer el crecimiento como fuerza política de Podemos. Operación política de la que seguramente también participan sectores de la izquierda española. Algo que se traduce en cosas como en que allí donde antes ganaba  la derecha, PP, o la derecha nacionalista, la disuelta CiU, ahora pierde votos y  crece Podemos o alguna de sus marcas. La segunda causa es la falta de un liderazgo fuerte dentro del PSOE. La mediocridad es fácilmente disimulable ante el común de la opinión pública pero más difícil de ocultar a niveles altos, entre iguales. Las divisiones dentro del PSOE están provocando que gente que se queda fuera del reparto de poder este canalizando el voto hacia otros partidos, principalmente hacia Ciudadanos.

 

¿El actual mapa político español es algo temporal o pasara a ser algo habitual de la política española? En mi opinión es algo temporal, no creo que el poder y apoyo social de los emergentes en la sociedad española sea tan elevado como el reflejado por las urnas el pasado 20-D, sino que se debe a factores puramente circunstanciales. Podemos está formado por sectores residuales de la política española, de ideología comunista, que eran unos apestados ideológicos en la sociedad española hasta las europeas del 2014. Es muy difícil que puedan contar con el apoyo electoral de sectores de la derecha española durante mucho tiempo, sobre todo si la situación de la economía española se complica, la bolsa cae, la calificación de España pasa a bono basura, y cosas de esas. ¿Ciudadanos? En mi opinión es  una moda ideológica, que triunfa por desconocida, sin estructura, con un liderazgo, el de Albert Rivera, muy cuestionado a nivel nacional. Evidentemente, la posibilidad de que alguno de los partidos que hasta hoy han constituido el bipartidismo, PP y PSOE,  salte por los aires, siempre existe, pero no creo que el liderazgo de Pablo Iglesias o Albert Rivera sea tan fuerte como para integrar los restos en sus respectivas fuerzas políticas.

 

¿Qué alternativa de gobierno aportaría mayor estabilidad política a España? Es evidente que la llave de la estabilidad política la tiene en este momento Ciudadanos, partido cuyo líder, Albert Rivera, ha dicho algo tan absurdo y chantajista como que no entraran en ningún Gobierno que no presidan. El PSOE no podrá gobernar con una coalición de izquierdas sin contar con el apoyo de Ciudadanos. Por otro lado el PP para poder gobernar necesitaría el apoyo de Ciudadanos y el compromiso del PSOE de que se va a abstenerse en votaciones importantes, como por ejemplo, los Presupuestos Generales del Estado, Ley que de forma oportuna, inteligente y acertada aprobó, el Gobierno saliente.  Viendo los resultados, en mi opinión, una coalición formada por  PSOE, Ciudadanos y Podemos, de ser posible, gracias a renunciar Podemos a muchas de sus radicales  reivindicaciones, seguramente sería la que aportaría más estabilidad a España, pero parece difícil, incluso por parte de Podemos, pues Iñigo Errejon acaba de proponer que sea un independiente y no Pedro Sánchez, quien lidere un Gobierno al que de su apoyo Podemos. Independientes en España,  políticamente hablando ¿En quién estará pensando? Tal vez en personas  tan independientes como puedan ser    Carrillo Menéndez o Suarez Illana, ambos hijos de representativas personalidades de la Transición. Lo que está claro es que España no podrá aguantar durante mucho tiempo en una situación de ingobernabilidad, buscando el gobierno que en este momento más interese a las elites dirigentes, pues ello afectara de forma muy negativa a la economía, a la bolsa y a la calificación de la deuda.


martes, 15 de diciembre de 2015

DEBATE ENTRE RAJOY Y SÁNCHEZ: LO ÚNICO NUEVO LO SUBLIMINAL.

A pesar de que hay expertos que defienden que tal o cual debate dio la victoria o hizo perder a este o aquel candidato, la realidad, obtenida a través de encuestas,  es que la influencia que los debates ejercen sobre el voto de los ciudadanos, es muy baja. A pesar de ello, a 5 días de las próximas elecciones generales los líderes de los principales partidos políticos españoles, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, han celebrado un debate, seguramente por si lo veía algún despistado que todavía no conocía sus ideas y propuestas. Lo más llamativo del debate sin lugar a dudas ha sido la enorme cobertura que le han dado los medios de comunicación. Es evidente que en la sociedad española existe la mayoritaria  opinión de que las próximas elecciones no son como otras, sino que se considera que serán transcendentales para el futuro de la democracia española  debido a la actual situación de España  y al previsible  fraccionamiento del mapa político.

El debate entre el presidente Rajoy y el líder de la oposición Pedro Sánchez ha sido  aburrido, una repetición de cosas ya dichas, y de sobra conocidas por la opinión pública,  sin que ninguno de los candidatos aportara alguna propuesta, idea, o dato nuevo. Eso sí, ha sido un debate fuerte, o usando el mismo calificativo utilizado por Rajoy, vibrante. Es decir, ha sido un debate sobre contenidos ya conocidos y por tanto la opinión pública, el electorado, lo único que podrá valorar es como los candidatos han expresado y defendido su  mensaje y rebatido el del contrario.

Como suele ocurrir con  este tipo de debates, el celebrado entre Rajoy y Sánchez ha estado también cargado de mensajes subliminales. Alex Grijelmo, en su libro “La Información del Silencio”, dice que cada receptor interpreta los mensajes que recibe de acuerdo a su particular saliencia. Y dice, la saliencia es aquello que la mente tiene más a mano cuando debe recurrir a un contexto. Es decir, lo que sobresale en ese contexto. Seguramente cada ciudadano español que ha visto el debate ha interpretado de una forma diferente los mensajes que han enviado los candidatos. Unos se habrán fijado en las corbatas los candidatos, otros,  en sus bolígrafos, otros tal vez únicamente han dado importancia a lo que se ha dicho verbalmente. A  mí personalmente, me ha llamado mucho la atención los bolígrafos de los candidatos, en concreto los bolígrafos que llevaba el presidente Rajoy, ¿Por qué sentía la necesidad de coger uno u otro? ¿Simple costumbre a la hora de trabajar con papeles, o deseaba enviar algún mensaje?. O rizando todavía más el rizo, ¿Se los había regalado alguien? y si es así ¿Conocía Rajoy su significado? Sánchez, que solo llevaba un bolígrafo, también de color negro, hay que reconocer que lo manejaba con mucha más naturalidad.  Siendo muy curioso que Rajoy a igual que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, sean partidarios de usar ante las cámaras de televisión bolígrafos de color rojo, ¿Simple casualidad o algo más? Sera un bolígrafo rojo el puente necesario para que se produzca un futuro pacto de gobierno entre el PP y Podemos, ¿Disparatado? si, pero no por ello imposible.


Como diría Tomas de Aquino “Todo excepto Dios tiene una causa” y por tanto, teniendo en cuenta el nivel de corrupción que hay en la política española,  siempre que veo un debate  de este tipo  me hago la misma pregunta ¿ Por qué han dicho lo que han dicho, o dejado de decir o querido decir? ¿Es consecuencia de una reflexión personal o se debe a que alguien les ha llenado la cartera?

domingo, 13 de diciembre de 2015

CAMBIO CLIMÁTICO: UNA VEZ MAS "AGREEMENT", PERO ¿PARA QUE?

Tener un mínimo conocimiento de la historia es importante por muchas y diferentes razones. Una de ellas porque es fundamental para poder valorar lo que está ocurriendo a nivel político. Los grandes pactos, de transcendencia internacional, importantes por lo acordado y por ser duraderos, que ha habido a lo largo de historia siempre se han dado entre un número pequeño de países representativos de la esfera internacional. En nuestra época se ha puesto de moda, no tiene otra explicación, que se cierren pactos entre un numero grande de países, a nivel mundial, a nivel UE, etc., que luego no se respectan o simplemente no se traducen en nada importante y duradero. Un claro ejemplo es el  denominado  acuerdo universal de lucha contra el cambio climático que se cerró ayer la Conferencia Mundial del Clima celebrada  en Paris, sumándose a él 195 países, entre ellos países que tienen graves problemas de contaminación, como por ejemplo, China.

Un titular del periódico El País resume y  describe de forma clara el acuerdo, dice: “Una meta global ambiciosa pero sin objetivos de emisiones vinculantes”. El acuerdo fija una meta global, que la temperatura media a finales del siglo no supere los 2 grados respecto a los niveles preindustriales, pero no fija los objetivos nacionales a alcanzar para logarlo. Cada país deberá elaborar y presentar su plan de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, fijando su techo nacional de emisiones, y como y cuando decide alcanzarlo. El acuerdo fija que los techos deberán alcanzarse lo antes posible, estableciéndose que los países desarrollados deberán ser los primeros en reducir sus emisiones, teniendo los países denominados en transición más tiempo, aunque en ninguno de los dos casos se fija un año en concreto. El significado del acuerdo viene a ser algo así como si a la entrada de una ciudad apareciera una señal que dijera  "Reduzca la velocidad lo antes posible. Los que tengan mayor renta que reduzcan antes su velocidad”. Lo único que deja claro el acuerdo es que los países desarrollados deberán de financiar la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de los países con economías en transición, para ello se creara un fondo a partir del 2020 al que los países desarrollados deberán aportar cada año 100.000 millones de dólares. El acuerdo es un verdadero absurdo, carece de fuerza legal, y es  negativo para los países desarrollados.

El acuerdo climático es un verdadero absurdo. Carece de fuerza legal a no fijar objetivos nacionales, ni en cuanto a reducción de emisiones ni en cuanto a fechas. Los expertos dicen que con los planes nacionales de reducción de emisiones presentados ya por 187 países no se alcanzar el objetivo general, pues la temperatura subirá en 3º. El plan es muy negativo para las economías de los países desarrollados. Primero, porque deben de contribuir económicamente a la reducción de emisiones de países en transición. Segundo, porque provocara la pérdida de competitividad de economías de países desarrollados, los cuales tendrán que someter a sus economías antes que otros países a  unas normas medioambientales que incrementaran cotes de producción, contribuyendo así, sino se adoptan medidas, a favorecer todavía más su desindustrialización.

El Protocolo de Kioto (1997) sobre el cambio climático es un acuerdo internacional que tenía  por objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero durante el periodo 2008-2012 con respecto a 1990. La UE en su conjunto ha logrado cumplir los objetivos marcados por el Protocolo de Kioto, pero algunos países como España no. A cada país se le otorgó un margen distinto en función de diversas variables económicas y medioambientales según el principio de «reparto de la carga», de manera que dicho reparto variaba entre un  -21 % para Alemania hasta un +27 % para Portugal. España, que se comprometió a aumentar sus emisiones un máximo del +15% en relación al año base, lo ha sobrepasado hasta llegar al +23,7%, aunque gracias a la crisis ha podido maquillar el resultado ya que en el 2004, España emitía un 53% más que en 1990. Pero según los expertos el cumplimiento de Protocolo de Kioto ha provocado una fuerte pérdida de competitividad de la UE y contribuido a su desindustrialización, entre otras cosas porque ha provocado que subiera el coste de la energía.

Un claro ejemplo de la pérdida de competitividad de la industria debido al incremento del coste de la energía lo tenemos con la crisis del acero. El coste energético en Europa relacionado con las industrias que utilizan intensivamente la energía, como es el caso del acero, es mucho más alto que fuera de la UE, en países que no han cumplido con el Protocolo de Kioto. Es decir, el establecimiento de normas medioambientales ha hecho caer la industria de la UE, como es el caso del sector del acero, produciendo despidos masivos, y varias plantas de la UE han tenido que reducir su producción o cerrar.

El nuevo acuerdo mundial contra el cambio climático nace condenado al fracaso. Los países desarrollados que decidan adoptar medidas para cumplir el acuerdo contra el cambio climático estarán condenando  a su industria a desaparecer, al perder esta competitividad frente a países que decidan no adoptar dichas medidas, es decir, no reducir la emisiones de gases de efecto invernadero, o retrasar su reducción.  Par que el acuerdo contra el cambio climático fuera eficaz, no afectando de forma negativa a las industrias de los países industrializados, debería haber fijado objetivos a alcanzar en fechas concretas, no solo a nivel nacional sino también por tipo de industria, medios de transporte, etc.,  es decir debería contemplar un conjunto de normas  de obligado cumplimiento a nivel global, de tal forma que una empresa de un país respetuoso con el medioambiente, deseoso de cumplir el acuerdo de ayer, no vea reducida la competitividad de su industria respecto a otro con una regulación medioambiental más lasa, al tener que estar sometida la industria de  todos los países a las mismas normas internacionales. Ante  el acuerdo contra el cambio climático los países desarrollados tienen tres alternativas: Condenar su industria a desaparecer, cumpliéndolo. No cumplirlo. Y tres, imponer aranceles a los productos provenientes de países con una regulación medioambiental con menor exigencia en cuanto a reducción de emisiones. En mi opinión, la lucha contra el cambio climático requiere no absurdos acuerdos sino invertir mucho más en investigación y desarrollo de tecnologías destinadas a capturar, almacenar y eliminar el CO2 y una regulación global sobre emisiones, vinculante e igual para todos los países.

La lucha contra el cambio climático es utilizado por muchos grupos para atacar el sistema capitalista occidental, y por tanto es entendible la alegría que manifestaron  ayer al firmarse el acuerdo, pero y la euforia de los gobernantes de los países desarrollados occidentales ¿A qué se debe? “Agreement” ¿Para qué? ¿Qué se esconde detrás del acuerdo contra el cambio climático? ¿Qué intereses, económicos  ideológicos, etc.,  lo han hecho posible? No creo que el actual acuerdo contra el cambio climático pueda contribuir a frenar el porcentaje de emisiones de gases de efecto invernadero, como mucho puede provocar  que unos países las reduzcan, incrementando el coste de la energía y reduciendo su industria,  mientras otros aumentan  su producción industrial, con energías de bajo coste y muy contaminantes. En este sentido el comercio de derechos de emisión de COva a favorecer que unos países decidan renunciar a su industrialización a cambio de vender sus derechos de emisión a países industrializados, los cuales en beneficio de una mayor competitividad no desean reducir las emisiones producidas por su industria, como ya está pasando con algunos países de la actual UE, pertenecientes a lo que se conoció como  Europa del Este. Pero lo más preocupante no es el acuerdo de ayer sino  las numerosas similitudes que se están dando entre los últimos años de la Administración Clinton y los de la actual Administración Obama. Al final de la era Clinton se firmó el Protocolo de Kioto, ahora se ha firmado el actual acuerdo contra el cambio climático, ¿Coincidencia o algo más?

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domingo, 6 de diciembre de 2015

DÍA DE LA CONSTITUCIÓN: ‘LO QUE FUE NO ES LO QUE ES’.

El Día de la Hispanidad, o también llamado el Día de la Fiesta Nacional, 12 de Octubre, y el Día de la Constitución, 6 de Diciembre, desde siempre son dos fechas cuya celebración por las elites dirigentes despiertan en mí una especial atención. Todos los años, por diferentes motivaciones,  sigo con interés tales celebraciones. El Día de la Hispanidad, principalmente,  porque es un día especialmente militar, en el que unidades de  las Fuerzas Armadas de España realizan un desfile presidido por la Casa Real, por el Jefe de Estado, hoy el rey Felipe VI. Porque es el único día en el que un ciudadano común tiene la oportunidad de ver desfilar a sus Fuerzas Armadas, de ver desfilar a un Ejército que rinde honor a las elites dirigentes españolas, pero que todos los españoles pagamos con nuestros impuestos. El segundo, el Día de la Constitución, porque siendo una celebración  en la  que al igual que en la anterior participan representantes de las principales instituciones del Estado, y  de los sectores con más poder de la sociedad española, está presidida no por el Jefe del Estado, el rey Felipe VI, sino  por el actual poder político democráticamente elegido, es decir, es una celebración en la que no participa la Casa Real. Algo que siempre me conduce a la misma pregunta ¿No participa la Casa Real porque no celebra el día de la Constitución o por qué? Pregunta que  todavía tengo sin  respuesta.  

Me suelen gustar los discursos del presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada, principalmente porque es claro, le da importancia a la historia, y los priva de connotaciones de índole partidista. El que ha hecho hoy con ocasión de la celebración del 6-D también me ha gustado. El presidente Posada ha comenzado sus discursos haciendo un relato histórico, luego ha hecho algunas propuestas, como la de la necesidad de fortalecer el Estado de Bienestar y reformar las instituciones del Estado, para así reducir la desafección de los ciudadanos hacia las mismas. Luego  ha resaltado la importancia del pacto contra el terrorismo  yihadista, invitando a que se sumen aquellos, partidos políticos etc.,  que todavía no lo han hecho,  ha alertado sobre algunos peligros que percibe, como el de la conflictividad territorial, como el de una nueva división del pueblo español, y por ultimo ha querido renovar  el llamamiento a la concordia que hicieron en el 78 las elites políticas de la época. El presidente Posada ha hecho un  relato histórico,  recordando lo que significó para España, para la sociedad española, la aprobación de la Constitución de 1978, afirmando algo a mi parecer importante y cierto, que creo que es conveniente repetir  “La Constitución del 1978 fue un gran éxito colectivo”. Y  también a través de su discurso ha recordado palabras de discursos del gran ausente, la Casa Real de Borbón, o sea la Jefatura del Estado.

Me gusta la Constitución del 78, nunca antes el pueblo español había tenido una Constitución que reconociera a los ciudadanos tantos derechos y libertades. La Constitución del 78 es equiparable a la de las principales democracias occidentales. Salvo pequeños detalles, como puede ser el Titulo II, de la Corona, no creo que necesite reformarse. Aquellos dirigentes que proponen incluir en la Constitución más derechos para los ciudadanos, o tienen deseos utópicos o únicamente están intentando manipular a la opinión pública con fines electorales. Como bien ha dicho el presidente Posada “La Constitución del 1978 fue un gran éxito colectivo”.
 
“La Constitución del 1978 fue un gran éxito colectivo”, es innegable, pero una cosa es el pasado y otra muy diferente el presente, una cosa es lo que fue y otra lo que es. Y es lo que es, precisamente, lo importante, aquello por lo que debemos juzgar la España actual. La España actual es muy diferente a la del 78. Entonces España avanzaba, buscaba democratizarse, progresaba, se integraba en la esfera de las principales democracias occidentales, mejoraban los servicios públicos, mejoraba la calidad de vida de los ciudadanos, y las elites dirigentes  buscaban la concordia, buscaban una convivencia pacífica entre todos los españoles. Hoy España retrocede en todos los ámbitos, político, social, económico, y también en el ámbito de los derechos y libertades. España se empobrece, aumentan las desigualdades sociales, se vuelven a  elegir  equivocados aliados en la esfera internacional, y las elites promueven el incremento de la conflictividad social. Hoy en España muchos ciudadanos viven en un ambiente de total hostilidad y continuas amenazas. La España de hoy es muy diferente a la del 78, la concordia se ha roto, y ya no es un fin a logar por las elites dirigentes.

La celebración de hoy tiene una importante peculiaridad, se ha observado que la elite política admite como un éxito consumado que el mapa político español se haya fraccionado en cuatro partidos políticos, PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos, habrá que esperar al próximo 20-D para saber si la ciudadanía lo percibe también así, o no  y en qué proporción.  Además, al estar próximas una nuevas elecciones generales, la celebración del Día de la Constitución de hoy tiene un especial interés, en concreto los comentarios efectuados ante los medios de comunicación por los principales lideres políticos. Pudiéndose agrupar en dos grandes grupos. Los líderes de PSOE, Ciudadanos y Podemos, respectivamente Sánchez, Rivera e Iglesias,  creen que en mayor o menor medida se debe de reformar la Constitución. Por el contrario el líder del PP, el presidente Rajoy, dice que cree que no es lo prioritario en este momento.

Aunque se suele repetir siempre que hay unas elecciones, por su importancia creo que es importante recordar que elegir una opción política u otra siempre tiene consecuencias. La democracia es únicamente el gobierno de la mayoría. La gestión política es ante todo ideología. El político no decide en función de sus conocimientos, sino principalmente en función de su ideología. Lo que hay que valorar a la hora de elegir a un gobernante a través de las urnas no son sus títulos académicos, ni sus conocimientos, ni su experiencia, sino sus ideas y que soluciones propone  en función a ellas. Las desigualdades, no solo de carácter económico, sino también de otro tipo, han aumentado enormemente en los últimos años en la sociedad española. Está constatado que los países con un elevado nivel de desigualdad están siempre condenados al fracaso. Una elevada  desigualdad acaba provocando siempre no solo conflictividad social sino también  el empobrecimiento colectivo, el empobrecimiento de los países que la padecen. Dedicar esfuerzos y recursos a que no progresen unos, la mayoría, en beneficio de unos pocos,  a la larga solo acaba  provocando que no progrese el conjunto. Si dos ciudadanos viven en plantas distintas de un edificio, para poder encontrarse solo hay dos alternativas, que uno suba o que el otro baje. Con la desigualdad social pasa algo parecido.  La igualdad es un valor democrático reconocido en la Constitución del 78, para que sea una realidad, para que disminuyan dichas desigualdades solamente  hay dos posibilidades: Que los de arriba disminuyan ingresos y pierdan privilegios, o que los de abajo mejoren, progresen,  aumentando su calidad de vida y sus derechos.

El partido político Podemos, es principalmente un instrumento al servicio del comunismo internacional en España. Por tanto que  su líder, Pablo Iglesias, acompañado de un ex JEMAD del Ejército Español, Julio Rodríguez, diga cosas como  “Muchas gracias 1978”, y  promueva una reforma de la Constitución, es preocupante. Es preocupante, porque Podemos hoy por hoy no tiene fuerza política para abrir un proceso constituyente, ni  simplemente para  reformar la actual Constitución, entonces ¿Con que ocultos apoyos cree contar Pablo Iglesias? No lo sé, pero  vivimos en un mundo globalizado, en el que todo país, España también, tienen intereses y compromisos internacionales, y por tanto es importante recordar a las elites españolas ‘Cuidado, los abusos que cometas en España, igual los tienes que pagar fuera’. No solo eso, sino que los posicionamientos en política internacional tienen repercusión sobre la política nacional y la economía. Por tanto, si Francia ha pedido apoyo miliar a España y el Gobierno se lo ha negado, lo sabremos, se notara en la evolución de las relaciones comerciales, de inversiones, etc.,  entre ambas economías, española y francesa. 

Podemos,  es el enemigo, es el  principal enemigo de la democracia española. Podemos es un Prestige que amenaza toda España con sus conceptos sobre democracia, libertad, forma de hacer política, relaciones internacionales. Podemos es un barco que debe ser hundido o acabara hundiendo la democracia  española provocando tensión política, inseguridad ciudadana y conflictividad social. Podemos es  un enemigo que dice estar militarizado, que da a entender que tiene más poder que el que se le conoce, pero no temamos, recordemos que   ‘No son muy poderosos aquellos que consideran que ganar una guerra depende de derrotar a un soldado’. 

viernes, 4 de diciembre de 2015

¿EMERGENTES? NUEVAS SIGLAS PARA UNA VIEJA POLÍTICA.

Ha comenzado la campaña para las próximas elecciones generales, que se celebraran el próximo 20 de Diciembre. Las últimas encuestas sobre intención de voto reflejan que ya es un realidad el fraccionamiento del mapa político español, surgiendo con fuerza dos nuevos partidos de dimensión nacional, Podemos y Ciudadanos, partidos que crecen  a costa del desgate de las fuerzas políticas tradicionalmente mayoritarias, PP y PSOE, de tal forma que ningún partido político sacara suficientes votos para gobernar en solitario, y por tanto será necesario algún tipo de pacto para formar el próximo Gobierno de España. Todo aquel que durante los últimos años  haya seguido un poco la política española, habrá percibido que el fraccionamiento del mapa político español no ha sido espontaneo, sino que ha sido provocado y favorecido por las elites dirigentes españolas, en mi opinión, a través de un acto de elevada irresponsabilidad e insensatez, pues no obedece a razones ideológicas, al pluralismo existente en la sociedad española, sino a interés de diferente índole, concretos, todavía ocultos muchos de ellos, de sectores de la sociedad española.

La coyuntura internacional, la catastrófica y conflictiva situación de España, y el elevado fraccionamiento del mapa político, algo que dificultara la gobernanza de España, dan a entender que las próximas elecciones generales no serán una más sino trascendentales para el futuro de España. La caída de las economías emergentes y el incremento de los conflictos armados hacen prever que el  2016 será un año malo a nivel internacional, y por tanto también malo para España. Para una España cuya economía se encuentra en una situación catastrófica. Crece el PIB, pero en una coyuntura en la que el empobrecimiento aumenta, la mayoría de los ciudadanos pierden poder adquisitivo, el déficit es todavía alto, y la inflación muy baja.  Situación catastrófica de la economía española que se puede resumir con una palabra: Abengoa. Muchas grandes y medianas empresas españolas se encuentran en una situación similar o incluso peor a la de Abengoa. El problema de las empresas españolas no es la falta de crédito, sino un elevado endeudamiento, un elevado apalancamiento,  y una estrategia basada en altas expectativas, que de no cumplirse a corto plazo provocaran la quiebra de muchas de ellas. Ante este desolador panorama ¿Qué gobierno sería deseable que saliera de las urnas el próxima 20-D? Es difícil saberlo. Después de cuatro años de legislatura durante los cuales el Gobierno de España, del PP,  teniendo mayoría absoluta, no ha solucionado ningún problema importante de la sociedad española,  es difícil saber que es mejor: ¿Un Gobierno que de estabilidad a España, o una situación de elevada inestabilidad, es decir,  el caos, una crisis de la que de forma inevitable tengan que salir dichas soluciones?

Durante la última legislatura los partidos políticos, incluido el del Gobierno, el PP,  han estado en una continua campaña electoral. Lo más llamativo fue la organización del 15-M para lanzar a Podemos a la arena política a través de una intensa campaña mediática de propaganda política, principalmente televisiva. Además,  debido a la falta de creatividad de los actuales  medios de comunicación y el auge del infoentretenimiento tenemos a los políticos todos los días en los medios, repitiendo casi lo mismo. Por tanto,  con un elevado porcentaje de votantes que dicen estar  indecisos (Un 41% según el CIS), no sé en qué medida la campaña electoral que acaba de empezar va a influir sobre el voto de los ciudadanos, siendo así determinante  o no para el resultado de las próximas elecciones, lo que sí está claro es que será una campaña aburrida, sin propuestas nuevas, en la que  los candidatos repetirán una y otra vez los mismos contenidos, contenidos ya conocidos,  en diferentes escenarios. Sera una campaña que solo servirá para que los candidatos se presenten en sociedad antes los simpatizantes de sus respectivos partidos.

En los últimos años los medios de comunicación con el fin de impulsar a los denominados partidos emergentes, Ciudadanos y Podemos, han logrado sacar el debate político del plano ideológico, de las ideas, para llevarlo al plano del enfrentamiento entre lo que denominan la vieja política y la nueva política, o sea los emergentes. Personalmente soy muy escéptico sobre el fruto que puedan dar  los partidos emergentes. Aún más, si analizamos los perfiles de los cuadros de Podemos y Ciudadanos, sus posicionamientos políticos y propuestas, comprobamos que lo que se denomina nueva política no es otra cosa que nuevas siglas para maquillar una muy  rancia vieja política. La nueva política, Ciudadanos y Podemos, es ante todo dos cosas. Uno, manipulación mediática de la opinión pública. Y dos, discriminación política.

Manipulación mediática de la opinión pública. Sin ser todavía  nadie en la política española ni Pablo Iglesias ni Albert Rivera, los medios, principalmente televisivos, les dieron un elevado apoyo mediático, colocándolos al mismo nivel que representativos personajes  de la vida política española (Es importante recordar que en plena era digital  más de un 70% de los ciudadanos se informan todavía a través de la Televisión). Discriminación política, el caso más llamativo, aunque no el único,  el debate  organizado por el periódico El País, en el que participaron PSOE, Ciudadanos y Podemos, no acudió el PP,  dejando fuera, discriminando,  a IU y UPyD, partidos, con representación en el Congreso en la anterior legislatura, impulsando de esta forma su pérdida de popularidad y caída en votos.

La nueva política no es otra cosa que manipulación mediática de la opinión pública, nuevas siglas para defender a través de nuevos escaparates digitales, mediáticos, una rancia vieja política. Es evidente que la denominación de emergentes les va como anillo al dedo, muchos de sus dirigentes han sido sacados de las alcantarillas de la política española para convertirlos mediáticamente en los elegidos para liderar la salida de España de la catastrófica situación en la que se encuentra. Da la impresión de que quieren poner en entredicho el viejo dicho de “No está hecha la miel para la boca del asno”.

Nuevas siglas para una vieja política. Podemos, es un partido con una arcaica ideología comunista, es un instrumento en  España del comunismo internacional,  muchos de sus dirigentes hasta hace dos días eran ideológicamente apestados, leprosos, en la vida política española.  Podemos ha logrado crecer en apoyo social no por sus ideas y propuestas sino únicamente  por el apoyo que recibe de corruptos sectores de la derecha española, que tienen vínculos e intereses comunes con el comunismo internacional y sus aliados. En las próximas elecciones allí donde pierda votos el PP subirá Podemos.  Es evidente que Podemos es el enemigo,  el principal enemigo de la democracia española, y por tanto también lo son sus aliados. Un enemigo creado por sectores de las elites dirigentes españolas, no sabemos bien con qué fin. Ciudadanos, es un partido claramente de ideología liberal (Sus eurodiputados en el Parlamento Europeo están integrados en el Grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa). Un partido que  ha ocultado y oculta  sus verdaderas ideas para convertirse en el partido de los arrimados, creciendo así  en estructura a base de integrar a gente que había fracasado con otros partidos políticos, y en votos gracias al desgate del PSOE, gracias al voto que dirigentes del PSOE, desconozco por qué razón, tal vez luchas internas,  están canalizando  hacia ese partido.

Como las ideas de los emergentes son tremendamente populistas, aunque muchas de ellas inviables, como la de proponer una compensación salarial, los líderes de la denominada vieja política les suelen atacar diciendo que les falta experiencia en gestión para poder gobernar España. Personalmente, no creo que ese sea el problema. El ex presidente Felipe González gobernó 14 años España sin tener experiencia previa, y tan poco le fue tan mal. Por el contrario ahí tenemos al ex vicepresidente Rato, una persona con mucha experiencia, y a pesar de ello  con una gestión discutible en el Gobierno, nefasta al frente del FMI, y corrupta al frente de Bankia, e investigado por blanqueo de capitales. La falta de experiencia no es lo grave, sino que tanto Podemos como Ciudadanos no tienen estructura para gobernar España ni un proyecto político viable.

No estoy con todo ello diciendo que crea que es mejor votar a los partidos de siempre, como he dicho antes, visto lo visto de la película de la democracia española uno ya no sabe que es lo mejor, estabilidad o el caos. El principal problema que tiene la sociedad española es que las elites dirigentes no se conforman con gobernar sino que también quieren utilizar el poder que emana del Estado democrático para someter a los ciudadanos, recurriendo para ello a todo tipo de abusos, represión judicial y policial, violaciones de los derechos humanos, violencia de Estado, etc. Por ello, personalmente soy partidario de la idea de “Si tu jefe, o sea el que te paga,  no se presenta a las elecciones no votes, pues si lo haces tal vez estés tirando piedras sobre tu propio tejado”.