Desde hace tiempo es más que evidente que las elites
dirigentes griegas se comportan como unos piratas. En el pasado, las elites
griegas endeudaron excesivamente el país hundiendo la economía con equivocadas políticas,
a la vez que incrementaban sus inversiones en el exterior, ahora Grecia se encuentra al borde de la quiebra,
con una sociedad que sufre un elevado nivel de pobreza y desempleo. En el 2010
las elites griegas solicitaron un rescate a la UE, desde entonces han obtenido
de la UE y el FMI ayudas económicas por un valor aproximado de 240.000 millones
de euros, a la vez que los acreedores les concedían una importante quita a su
deuda pública, se habla de entorno al 50%. Pero la cosa no queda ahí, las
elites griegas intentan imponer ahora una nueva quita a sus acreedores, muchos
de ellos, de forma directa o indirecta, gobiernos de la UE, es decir, las elites griegas quieren que su deuda
publica la paguen el resto de los ciudadanos de la UE, además, se niegan a
seguir con reformas que la UE considera
imprescindibles para que Grecia supera la crisis que sufre. Para lograrlo, para
evitar cumplir los compromisos contraídos, para evitar hacer frente al pago de
la deuda pública, etc., las elites
griegas han permitido y favorecido que en Grecia se produjera una alternancia
comunista, han favorecido que un partido político de ideología comunista,
Syriza, llegara a gobernar. Los dirigentes de Syriza llegaron a Bruselas con
intenciones desafiantes y amenazantes, amenazando con cosas como no cumplir los
compromisos contraídos por gobiernos griegos anteriores y con alejarse de la UE y de la OTAN para integrarse más en la órbita del comunismo
internacional. Pero ello parece que no ha convencido ni asustado a un importante
y representativo número de dirigentes de la UE, provocando que desde la UE se esté ahora amenazando al Gobierno griego con la expulsión
de Grecia de la UE sino hace frente a sus compromisos y acepta las
recomendaciones de sus instituciones.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, acaba de
decir en el Congreso de los Diputados que España quiere cambio. Desconozco de dónde
saca tal información, ¿Habrá llamado a todos los ciudadanos en edad de votar
por teléfono? ¿Le han enviado cartas sus votantes, sus militantes? ¿Se lo han
transmitido los líderes de las elites dirigentes españolas? Cuidado, a lo mejor
no son todos los españoles. En principio parece ser que más de un 30% de la
sociedad española no se identifica con el deseo de cambio, y son gente igual
que el resto, que trabaja, que consume, etc., algunos de ellos también con mucho poder en la
sociedad española. Pero en tal caso, siendo cierto lo que dice el secretario
general del PSOE, Pedro Sánchez, ¿Qué cambio quiere la sociedad española? El
que se ha producido en Grecia, o incluso uno peor. Mire, mire Sr. Sánchez, como
humilde ciudadano que soy, sin intereses
políticos en la politizada sociedad española, debo de decirle que en política hay
que ser muy prudente a la hora de reivindicar
cambios, pues muchos cambios provocan efectos colaterales no deseados, no sabiéndose
a quien el destino le tiene reservado uno de esos colaterales.
España, la sociedad española, como otras veces en su pasado vuelve a tener
un grave problema con la casta política,
con el conjunto de los dirigentes políticos. Con esa casta política que
representa la cara visible de las elites dirigentes españolas. Con una casta política
cuyos miembros han abierto la puerta a un partido como Podemos, de ideología comunista,
favoreciendo que incremente su poder político. Es evidente que sectores de las
elites dirigentes españolas están realizando una operación política para que
Podemos incremente su poder político y entre en las instituciones del Estado,
ello no se hubiera nunca podido realizar sin contar con la complicidad de los
hasta hoy dos mayoritarios partidos de la sociedad española, PSOE y PP. ¿Que ciudadano puede llegar a pensar que cosas
como su futuro, su puesto de trabajo,
sus derechos y libertades, van a estar más protegidas gobernando un partido
controlado por el comunismo internacional cómo Podemos? Ninguno cuerdo, creo
yo, a pesar de ello hay sectores de las elites dirigentes españolas que si lo
piensan, y ello es debido a que tienen vínculos
con el comunismo internacional a través de sus inversiones en el extranjero, o
a que han sucumbido ante la compra de apoyo y de votos realizada en España por
el moderno y rico comunismo internacional, y sus afines.
La sociedad española está siendo objeto de un proceso de manipulación
política destinada a incrementar el poder político de Podemos, y a crear un ambiente de aceptación en la sociedad
española de esta nueva fuerza política de ideología comunista. Un claro ejemplo
lo tenemos con lo ocurrido con el concejal Guillermo Zapata, de Ahora Madrid, o
sea Podemos, del Ayuntamiento de Madrid. Durante la campaña
de las pasadas elecciones locales los dirigentes políticos y sus medios de comunicación afines no enfocaron su atención
en el perfil político, profesional y personal de los miembros de la lista de
Ahora Madrid. Formado el gobierno del ayuntamiento de Madrid y ya siendo
alcaldesa Manuela Carmena, los mismos que antes callaron ahora dan a conocer informaciones sobre los miembros
de la lista de Ahora Madrid que ya tenían desde hace tiempo y que podían haber
condicionado el voto de los ciudadanos. Lo cual da a entender que el Partido
Popular quería dejar Gobernar a Podemos en el Ayuntamiento de Madrid. A mí el perfil de Zapata, me es indiferente, me llega
con saber que va en la lista de Ahora Madrid. En cuanto a los tuits de este
tipejo, los cuales no creo que haya leído mucha gente, su difusión en televisión
me ha alegrado el día. Lo que realmente me molesta de todo este asunto de
Zapata es que la televisión pública, RTVE, le haya concedido un espacio
televisivo al concejal Zapata para que enviara su discurso, para que difundiera
su propaganda, para que hiciera más propaganda de sus tuits, para que dijera
que iba a enviar cartas de disculpa. La complicidad y el apoyo de sectores de la derecha española, que
ejercen influencia sobre el actual
Gobierno de España, con Podemos es máxima. Apoyo del Partido Popular a Podemos
que tiene su explicación en la elevada corrupción política que hay en ese
partido. Todo esto me lleva a recordar el conocido dicho de “Él que no aprende
las lecciones del pasado está obligado a repetirlas”.
En España sectores de las elites dirigentes, seguramente
debido a que leen mucho a Cervantes, tienen tendencia a desear hacer Quijotes.
Tendencia que se observa de forma clara en la actual vicepresidenta del
Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, la cual no ha considerado necesario
dimitir a pesar de que nombro como delegado del Gobierno de la Comunidad
Valenciana, a Serafín Castellano, considerado ahora por la justicia española un
presunto criminal, ¿A qué información secreta habrá tenido acceso Castellano?
¿Se la estará pasando a los dirigentes comunistas de Podemos o de grupos
similares? En un país serio la vicepresidenta Soraya, persona a cargo del CNI, ya hubiera tenido que dimitir, los grupos políticos
hubieran presionado para que así fuera, pero es que España es diferente, aquí los
partidos políticos se apoyan para evitar asumir responsabilidades tanto políticas
como judiciales, e incluso se unen y apoyan para realizar una operación política
de apoyo al comunismo internacional, o sea, a Podemos. El problema es que crear
Quijotes tiene siempre un riesgo, el de que se lo acaben creyendo y decidan
atacar a aquellos que consideran sus molinos personales.
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