viernes, 26 de julio de 2019

POR FIN UN “NO” ACERTADO DEL PRESIDENTE SÁNCHEZ.


Lo ocurrido ayer en el Congreso de los Diputados, no logrando ser investido presidente el candidato, Pedro Sánchez,  del partido político con mayor representación, vuelve a situar a España en una situación de muy difícil gobernabilidad democrática. Es cierto que el presidente en funciones Sánchez cuenta con el menor apoyo que ha tenido un candidato a presidente en la historia de la democracia, los 123 diputados del PSOE, pero también es cierto que casi dobla en votos al primer partido de la oposición (66 diputados) incluso si consideramos  lo más probable, que  Vox es un satélite del PP, al que este controla, ambos sumarian 90, treinta y tres diputados  menos que el PSOE. Por lógica democrática  y  responsabilidad política  ayer Pedro Sánchez debió ser investido presidente, pero no ha sido así, y por tanto, debemos preguntarnos ¿Por qué? ¿Quién se beneficia con esta situación?

Unidas Podemos (UP) es la cuarta fuerza del país, representa únicamente 11,97% del Congreso, con 35 diputados. La decisión del presidente Sánchez de no ceder ante unas exigencias que UP planteo en forma de chantaje me parece muy acertada, de enorme grandeza política  y la mejor para España.  En una democracia, como se supone que es España,  UP no puede imponer reformas políticas  importantes en la sociedad porque es un partido muy minoritario, representa a una muy pequeña parte de la sociedad española. Por tanto, es lógico que Sánchez se negara a conceder  a Unidas Podemos, cargos en la estructura del Estado, ministerios, etc,  desde los que pudiera intentar llevar adelante esas reformas. Unidas Podemos es un satélite del comunismo internacional en España, cuyo secretario general, Pablo Iglesias ha cobrado y sigue cobrando del Gobierno de Irak por hacer propaganda política, a través de la cadena Hispan tv, algo que no creo que sea ni compatible con su cargo de diputado nacional, ni legal. Decir que UP pertenece a la órbita del actual comunismo internacional, llamado eufemísticamente, neocomunismo, no es un concepto abstracto, significa claros y concretos posicionamientos políticos, contrarios a la órbita democrática, occidental, capitalista y de defensa, como miembro de la NATO, en la que se encuentra, por lo menos teóricamente, España. UP no puede entrar en el Gobierno de España.

La decisión de Pedro Sánchez ha sido la más acertada y conveniente para España. Con los noes y abstenciones a su investidura, los grupos que decían que querían que fuera investido presidente han dejado claro, que no le ofrecían su apoyo porque compartieran sus ideas, su proyecto político para España, sino simplemente porque querían al frente del Gobierno de España a un PSOE muy débil, al que pudieran chantajear y condicionar fácilmente.

La decisión de Pedro Sánchez ha sido la más acertada y conveniente para España. No solo UP es un partido de ideología comunista, sino que esta constatado que ha sido creado con residuos ideológicos del comunismo internacional en España apoyados por sectores de la derecha afines al PP, los cuales les han dado apoyo tanto mediático como en votos. Lo cual conduce a preguntase ¿Por qué sectores de las elites dirigentes españolas están interesadas en apoyar a un partido de ideología comunista? ¿Qué buscan, que quieren provocar? En el debate de investidura, el actual líder del PP, Pablo Casado, dejo claro su interés por  que Sánchez pactara con Podemos. Algo parecido fue el posicioncita del líder de CS, Albert Rivera, ambos estaban interesados en presionar a Sánchez para que pactara con UP, para que concediera a sus dirigentes el  control de importantes ministerios. ¿Por qué? Creen que sería un forma de quemar, de desgastar al PSOE, lo querían utilizar en el futuro como excusa para justificar la entrada de la ultraderecha, Vox, en el Gobierno de España y ceder a sus reivindicaciones, en la actualidad, muy minoritarias en la sociedad española, o únicamente es que el comunismo internacional ha comprado a sectores de la derecha española cargos de ministro, y ahora no saben cómo dárselos a los dirigentes de Unidas Podemos.

Es todo un sinsentido. Lo único claro es que si en el 96, con el expresidente Aznar, España entro en una época de involución ideológica, cometiéndose en España abusos, violaciones de los derechos humanos, comportamientos políticos  intolerables en una democracia, debemos recordar que su segundo mandato acabo con un caso considerado por numerosos medios periodísticos y organizaciones de espionaje  como de  terrorismo de Estado (11-M), desde hace tiempo España sufre un proceso de degradación política. La mediocridad se ha adueñado de un porcentaje importante de la política española, buscando o contribuyendo únicamente a la degradación de la democracia y de las instituciones del Estado. Mediocridad política, diputados nacionales que su único mérito es que les han metido en una lista política, o extranjeros que pasan a hacer política España porque así lo decide el líder del partido sin tener vínculos con la sociedad española, hechos  que muy probablemente acaben provocando negativos efectos sobre el conjunto de la sociedad, creando una sociedad en términos generales más mediocre,  disminuyendo la calidad de los servicios públicos, creando un mercado laboral con empleos de baja cualificación  y bajos salarios, etc.

La situación de difícil gobernabilidad en la que ha entrado España solo beneficia a dos actores. Uno, a la Monarquía, que ve así fortalecido su rol en la sociedad española, apareciendo la antidemocrática  Jefatura del Estado  como algo que garantiza la estabilidad política del país a pesar de la situación política. Y dos, a los grupos de las elites dirigentes españolas que no creen en la democracia como forma de gobierno, entre los que destacan, los comunistas representados por Unidas Podemos, y la ultraderecha, los representantes en España de aquellos que provocaron la Segunda Guerra Mundial, Vox, la voz de los militares, y tal vez, también “su sastre”.

martes, 23 de julio de 2019

SÁNCHEZ DEBE DECIR NO A UN GOBIERNO DE COALICIÓN CON UP.


Los discursos y el resultado de la votación en el debate de investidura de Pedro Sánchez a  presidente del Gobierno,  ha dejado claro que el presidente en funciones tiene únicamente dos alternativas: Dimitir, y dejar que un nuevo candidato del PSOE a presidente del Gobierno busque un pacto con el PP o con Ciudadanos o forzar la convocatoria de nuevas elecciones. En su discurso el presidente en funciones, Pedro Sánchez, ha dejado claro que no se fía de Unidas Podemos, de tal forma que está dispuesto a darle a algunos de sus dirigentes sueldos de ministro pero no quiere darles responsabilidades importantes, lo que ha sido interpretado por Unidas Podemos (UP) como intentar utilizarlos como objetos decorativos.

Es evidente, que la entrada de UP en el Gobierno sería un error de graves consecuencias para España. Unidas Podemos es la re representación del comunismo internacional en España, ha crecido contando con el apoyo mediático y en votos de sectores de la derecha afines al PP, y su secretario general, Pablo Iglesias, cobra del Gobierno de Irán por hacer propaganda política a través de la cadena de televisión Hispan tv. A pesar de ser un partido de ideológica comunista y anti- OTAN, entre sus dirigentes esta un ex JEMAD de las monárquicas Fuerzas Armadas Españolas, el general Julio Rodríguez. Por tanto, es difícil saber que representa de verdad UP, que representa de verdad el partido de los chicos de las mochilas. En el 2016, su secretario general, Pablo Iglesias,  exigió la mitad del Gobierno a Sánchez, ahora se conforma con algo menos, pero ¿Para qué, para que quiere entrar a formar parte del Gobierno de España?

Además, la entrada de Unidas Podemos en el Gobierno de España serviría como justificación al PP para defender la entrada de la ultraderecha, de  Vox, de la voz de los militares y tal vez también su sastre, en las instituciones. Y en un futuro no muy lejano, siendo de prever que la composición del Congreso cambiara  en favor de la derecha,  también para justificar la entrada de Vox en el Gobierno de España. Pero eso no es todo, a Sánchez no le llega con los votos de Unidas Podemos para gobernar y aprobar cosas como la ley de Presupuesto Generales del Estado, necesitaría para ello también del apoyo de los diputados de ERC, y por tanto tendría que aceptar  ahora el  chantaje de ese partido,  que se negó a aceptar en el pasado convocando elecciones. El líder de ERC, Gabriel Rufián, ha dejado claro en su discurso  que siguen obsesionados con el mismo mensaje, que  quieren hacer un nuevo referéndum de independencia, no asumen que ya lo hicieron, que  lo ganaron y que declararon la independencia y por eso algunos de sus dirigentes están hoy en la cárcel y otros refugiados de la justicia en países extranjeros. Está claro, que el independentismo catalán sigue con la pantomima del proceso independentista, pactado con poderes del Estado,  para poder así reivindicar espurios intereses que nada tienen que ver con que Cataluña pase a ser un Estado soberano e independiente. Que Sánchez forme un Gobierno de coalición con UP no tiene ningún sentido ni lógico ni útil, la experiencia hace prever que no podrá gobernar sin el apoyo de PP o Ciudadanos.

España se encuentra en una situación política grave. Los denominados partidos políticos emergentes, Podemos, Ciudadanos y ahora también Vox, no están favoreciendo la gobernabilidad de España y la solución de problemas del país, sino impidiéndolo. El presidente Sánchez ha propuesto reformar el artículo 99 de la Constitución para que España pase a tener un sistema presidencialista, de tal forma que de las elecciones generales salga elegido ya un presidente del Gobierno. No sé si será la mejor solución. Lo que sí está claro es que España necesita una reforma del sistema electoral. La corrupción de los partidos políticos está permitiendo que en política entren personas mediocres,  sin méritos y lo que es todavía peor, sin vínculos con la sociedad a la que dicen representar, simplemente porque ello les interesa a los líderes de los partidos que confeccionan las listas. España necesita un sistema electoral que dote de más poder a los ciudadanos, de tal forma que estos puedan realmente elegir a sus representantes políticos y no como ahora listas de candidatos de partidos,  cerradas y bloqueadas.


lunes, 22 de julio de 2019

DEBATE DE INVESTIDURA: DESCONFIANZA, AMENAZAS Y PROPOSICIONES INDECENTES.


La XIII legislatura es distinta a todas las anteriores, por primera vez en la historia de la democracia en el Congreso de los Diputados hay cinco partidos políticos  de dimensión nacional, PSOE, PP, CS, Podemos, y Vox. Cinco partidos con cinco proyectos distintos para España; cinco partidos  que hoy han dejado claro en el debate de investidura a presidente del Gobierno que cada uno tiene una idea distinta de  donde desean situar a España.  El presidente en funciones, Pedro Sánchez, se ha presentado a la investidura sin contar con los suficientes apoyos para lograr ser investido, pidiendo la abstención de Ciudadanos y PP, apelando a la responsabilidad de Estado de sus líderes, Albert Rivera y Pablo Casado. El debate ha sido un poco surrealista; Sánchez, está negociando un gobierno de coalición con Unidas Podemos, pero ha dado la impresión de que no solo lo ve difícil sino que no es lo que más desea, y ha pedido de forma clara y publica la abstención de CS y PP. En el debate se ha hablado de muchos temas importantes, pero no de lo más urgente, como nombrar un nuevo presidente, como construir un nuevo Gobierno. Sánchez ha propuesto que permitan su investidura y luego reformar el artículo 99 de la Constitución para hacer más viable la gobernabilidad democrática de España, pero en general, los líderes los diferentes partidos han dejado claro que prefieren hablar de esas cosas en otros foros, sin micrófonos, sin que se dé a conocer a la opinión pública.  

A groso modo, durante el debate, como es costumbre, el candidato, Pedro Sánchez, ha propuesto sus soluciones para los que considera lo principales problemas del país, y desde la oposición sus medidas se han criticado, ninguno de los partidos de dimensión nacional, que hoy han intervenido, han dado su apoyo a alguna de las medidas propuestas por el presidente Sánchez. El discurso del presidente del PP, Pablo Casado, ha estado enfocado a justificar su no a la investidura de Sánchez y a presionarlo para que pacte con Unidas Podemos, con Pablo Iglesias, un gobierno de coalición, algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta que Podemos es un partido que creció gracias al apoyo mediático y en votos de sectores de la derecha afines al PP. Albert Rivera ha hecho más de los mismo, justificarse y buscar forzar un pacto entre el PSOE y Podemos, pero además, de forma sutil ha llamado a Sánchez cínico, diciendo que en la cámara decía una cosa, mientras en un despacho próximo, que ha definido como la habitación del pánico, negociaba la contraria.  Pablo Iglesias ha insistido en que quiere que dirigentes de su partido formen parte de un Gobierno de coalición; un Gobierno de coalición en la que sus dirigentes no sean simples elementos decorativos, que según parece es lo que le ha ofrecido Sánchez al negarles a dirigentes de Podemos que puedan ser ministros de lo que se conoce como ministerios de Estado (Defensa, Interior, Economía, Exteriores, Justicia) Según parece Sánchez le ha ofrecido algo, pero ni el presidente ni Iglesias se han atrevido a hacerlo público, no sé debido a que, tal vez, porque es algo deshonesto o indecente que no puede salir de la habitación del pánico.

Sánchez ha pedido de forma humilde y apelando a la responsabilidad la abstención de Casado y de  Rivera, pero estos le han negado el apoyo. Es evidente que quieren forzar a Sánchez a un pacto con Unidas Podemos. Un pacto que Sánchez no desea,  porque ve difícil gobernar,  al necesitar también los apoyos del independentismo catalán, PDeCAT y ERC, o porque considera un riesgo meter en el Gobierno a dirigentes de una formación como Unidas Podemos. El comportamiento de Casado es lógico. El PP es un partido que ya ha gobernado España y que puede volver a gobernar a corto plazo. Casado sabe que si no se le complican las cosas puede ser presidente dentro de cuatro años, o incluso antes. El caso de Rivera es distinto, CS no ha gobernado nunca y hoy por hoy, según las encuestas, es impensable que lo logre dentro de cuatro años. Su acercamiento a Vox le está provocando un enorme desgaste, importantes dirigentes han abandonado el partido, lo que  muy probamente se traduzca en menso votos en próximos procesos electorales.  

En la XII legislatura, en el Congreso de los Diputados teníamos un enemigo, un enemigo de la democracia, Podemos, hoy Unidas Podemos, la representación del comunismo internacional en España. Hoy tenemos ya dos, al haber entrado a formar parte de la composición del Congreso,  Vox. Vox es el heredero ideológico en España de aquellos que provocaron la Segunda Guerra Mundial, Nazismo y Fascismo, es  la voz de los militares, y tal vez, también su sastre.  Podemos representar una amenaza por ser la voz del comunismo internacional en España, por tener a su secretario general en la nómina del Gobierno de Irán, gobierno para el que hace propaganda política, a través de la cadena Hispan tv, y además porque según palabras de su secretario general, Pablo Iglesias, porque exigen concesiones indecentes al presidente Sánchez, tan indecentes, que este no se atreve a hacerlas públicas. Pero Vox representa todavía una  mayor amenaza, como lo ha dejado claro hoy su líder, Santiago Abascal. Un discurso calificado por el presidente Sánchez de intolerante, nostálgico del tiempo de la dictadura militar, y reaccionario. El presidente ha llegado a decir alerta, no sé si es una exageración o si realmente tiene datos para hacer tal anuncio, el futuro lo revelara. Peligrosos enemigos, pues no se conforman con que uno se aparte, no buscan solo el poder, sino también oprimir.  Siendo de resaltar, que Casado y Abascal compartían color de corbata, lo cual crea la duda de si compartirán también otras cosas, como por ejemplo, posicionamientos ideológicos.

El debate de investidura de hoy ha sido diferente, lógicamente porque después de cuarenta años de investidura, la ultraderecha, Vox,  ha vuelto a entrar en el Congreso y dar voz a los militares. El presidente de Vox, Santiago Abascal, el cual no sabemos si le han permitido entrar en la cámara  armado o no,  ha  dejado claro con su discurso que Vox representa una amenaza a la democracia y a los derechos y libertades de muchos ciudadanos españoles, derechos y libertades   conquistados con la aprobación de la  Constitución del 78. Abascal, con un discurso muy mediocre, después de contarnos parte de su vida, que no se a quien le puede importar, ha creado  una falsa amenaza, la de la organización terrorista ETA, para utilizarla para amenazar con el levantamiento de su gente en defensa de España. Lo cual es muy grave, al ser Vox la voz de los militares, e insisto, posiblemente también sus “sastre”, pues el levantamiento de su gente supondría el levantamiento de los militares. De forma clara los militare vuelven a ser una amenaza en España. Los militares, por ahora de forma sutil, han vuelto a atacar la política española, utilizando la táctica de los nazis, contribuyendo a crear partidos políticos. Primero contribuyeron a crear Podemos, pasando a ser el general Rodríguez, ex JEMAD, uno de sus principales dirigentes, lo que da a entender que sectores de las monárquicas Fuerzas Armadas tienen importantes vínculos con el comunismo internacional. Vinculos que pueden que vengan de a época de la dictadura militar o que hayan surgido de nuevas actividades empresariales de familias españolas en paises de la actual esfera comunista. Tanto al presidente de Vox, Santiago Abascal, como al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, el cual también ha hablado de pacto antiterrorista, son un poco peliculeros pues ambos saben que ETA ha dejado la lucha armada ya hace años, y hoy la principal amenaza que hay en España e la de un posible terrorismo de Estado.

La política española ha entrado en una situación, no sé si de alerta como dice el presidente Sánchez, pero sí de alto riesgo. Sánchez ha demostrado ser una persona de la que uno no se puede fiar, hoy dice una cosa y mañana puede hacer la contraria; además, hoy con sus posicionamientos ha dejado claro que no se conforma con haber llegado a lo más alto de la política española, con haber  pasado a engrosar la lista de los presidentes de Gobierno de España, no se conforma con que sus hijas a partir de ahora sean consideradas hijas de presidente, sino que quiere seguir gobernando a cualquier precio. Por tanto todo es posible, el comportamiento futuro de Sánchez puede llegar a ser de una enorme bajeza, con ofertas indecentes a Unidas Podemos y al independentismo catalán, PDeCAT y ERC, para así perpetuarse en el poder o no, y forzar así la convocatoria de nuevas  elecciones generales.   


sábado, 20 de julio de 2019

¿NEGOCIA SÁNCHEZ CON IGLESIAS O YA JUNTO A IGLESIAS? LO SABREMOS EL 22.


El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, es un político que tiene tendencia a sorprender a la opinión pública. Se nos contó, no sé hasta qué punto es cierto o no, que de  ser un mediocre dirigente del PSOE que pasaba por Ferraz, y ante la falta de líder en el partido decidió presentarse a primarias para secretario general, ganando. Dimitió como secretario general del partido y como diputado para que su partido pudiera apoyar la investidura de Mariano Rajoy. A pesar de ello, el partido lo volvió a elegirle  secretario general en unas nuevas primarias, algo insólito en política, pasando a ser  su líder indiscutible. Y sin ser diputado, logro ganar una moción de censura contra el expresidente Mariano Rajoy, sumando los apoyos de Podemos y los partidos independentistas catalanes. Luego volvió a sorprender, no logrando los apoyos a la moción de censura para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, teniendo que prorrogar los del 2018, que había aprobado el Gobierno de Rajoy. Algunas cosas son poco creíbles, pero todas sorprendentes.

Sánchez es un político con tendencia a sorprender. El pasado jueves, en el programa de La Sexta, el presidente Sánchez  afirmo que no habría gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos, porque Pablo  Iglesias ponía como condición para ello entrar en el Gobierno, y el presidente está dispuesto a aceptar independientes pero no a Iglesias debido a la desconfianza mutua que existe y a algunos de sus posicionamientos. Uno día después, el secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, dice que renuncia a entrar en el ejecutivo, y que serán otros dirigentes de su partido los que ocupen cargos en el Gobierno de España. Claro, ahora surge la duda de ¿Quién ha utilizado la táctica de la puerta en la nariz? La ha utilizado Unidas Podemos para negociar con el PSOE, o Iglesias y Sánchez la han utilizado de forma conjunta para que Sánchez pueda justificar, argumentar, la entrada de uno de los principales enemigos de la democracia española, Unidas Podemos, la representación del comunismo internacional en España, en el Gobierno.

No sé si el presidente Sánchez nos volverá a dar alguna sorpresa, clara o sutil, en su discurso de investidura del próximo lunes, lo que sí está claro, es que su discurso pasara a ser uno de los más esperados de la historia de la democracia española. Del discurso se desprenderá si ha llegado a algún pacto tanto con Unidas Podemos como con los partidos independentistas catalanes, PDeCAT y ERC. Dependiendo del discurso se sabrá si la decisión de Pablo Iglesias de no exigir entrar en el Gobierno ha sido tomada  de forma conjunta o no con Pedro Sánchez. Dependiendo del discurso se sabrá si el presidente Sánchez esta ahora dispuesto o no a ceder al chantaje de los partidos independentistas, PDecat y ERC,  a cambio de su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado.

En estos momentos nos encontramos amenazados por dos enemigos. La democracia española se encuentra amenazada y atacada por dos partidos políticos, anticonstitucionales  y antidemocráticos, que consideran la democracia el gobierno de los débiles y son partidarios de la violencia como principal instrumento de acceso al poder político: Unidas Podemos y Vox. Dos partidos en apariencia antagónicos ideológicamente, pero con claros vínculos a través de sus apoyos. Ambos han recibido apoyo mediático y en votos de sectores de la derecha española afín al PP. Y ambos han sido utilizados por los militares para volver a entrar en política cuarenta años después de las primeras elecciones democráticas. Primero, atacaron la política contribuyendo a crear Podemos, curiosamente, un partido de ideología comunista. Pasando a ser uno de sus principales dirigentes el general Julio Rodríguez, ex JEMAD. Luego, Aparicio el grueso de la fuerza,  con varios generales como dirigentes de  Vox, un partido que es ideológicamente heredero de aquellos que provocaron la Segunda Guerra Mundial, Nazismo y Fascismo. Los militares vuelven a ser una amenaza en España, por ahora sutil, pero no por ello poco importante. Unidas Podemos, con claro vínculos con países como Irán o Rusia, países que en estos momentos vuelven a amenazar de forma clara  la estabilidad mundial,  es una clara amenaza para la democracia española. Por ello, el próximo discurso de investidura del presidente en funciones, Pedro Sánchez,  pasara a la historia como uno de los más esperados por la opinión pública, estoy seguro, que tanto nacional como internacional.

viernes, 19 de julio de 2019

LA DEMOCRACIA ESPAÑOLA AMENAZADA POR DOS ENEMIGOS: PODEMOS Y VOX.



Es ya una realidad,  tras el largo periodo de dictadura militar, transcurridos 40 años  desde las primeras elecciones democráticas (marzo del 79), las elites dirigentes han quemado el sistema democrático surgido con la Constitución de 1978, fraccionando el mapa político de tal forma que la alternancia política no se produce con normalidad después de un proceso electoral. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, logro ganar una moción de censura contra el expresidente Mariano Rajoy, pero desde que fue investido presidente en junio del 2018,  no ha logrado contar con suficientes apoyos para aprobar unos Presupuestos General del Estado. Gobernó  en  el 2018 con los aprobados por el Gobierno de Rajoy, y ha tenido que prorrogarlos al 2019. Ello le llevo a disolver la XII legislatura en marzo de 2019 y convocar elecciones generales el 28 de Abril. Pero las últimas elecciones no han resuelto la situación, sino complicado, al fraccionarse la derecha surgiendo un nuevo partido, Vox. Por el momento, el presidente en funciones Sánchez tendrá muy difícil volver a ser investido presidente la próxima semana. Si no se produce un giro inesperado, España tendrá que volverá  a ir elecciones generales.

Si analizamos los contenidos de los discursos que han hecho  los diferentes partidos desde las últimas  elecciones del 28 de abril, se deducen tres claras conclusiones. Primera, desde  PP y Ciudadanos,  se quiere forzar al presidente Sánchez a que cierre un pacto con el  que se dice que es su aliado natural, Unidas Podemos. Segunda, Podemos, pues por el momento creo que su secretario general, Pablo Iglesias,  todavía no se ha operado, y por tanto el  cambio de nombre lo considero un absurdo,  quiere entrar en el Gobierno de España, dirigiendo un numero de ministerios proporcional a su apoyo al PSOE. Sánchez, se niega a que el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, entre en el Gobierno, alegando desconfianza mutua y que no le gustan muchos de sus posicionamientos políticos. Sánchez parece que se ha dado cuenta ahora de que no le gusta lo que Iglesias lleva defendiendo desde el 2014 cuando creo Podemos. Pero los números son los que son, incluso si Sánchez aceptara un gobierno de coalición con los comunistas, con Podemos, para gobernar y aprobar los Presupuestos tendría que ceder ante el chantaje del independentismo  catalán, PDeCAT y ERC. Quiero con ello decir, que Sánchez solo puede gobernar de una forma, contando con el apoyo de Ciudadanos o del PP, el resto, teniendo en cuenta la composición del Congreso de los Diputados y la actual coyuntura de la política española es simplemente soñar.

Desde la muerte del general Franco, 1975, en España se han producido tres errores políticos, tal vez inevitables, pero  de libro. Primero, restaurar la Monarquía. Restaurar, volver a dar la Jefatura del Estado a la Casa Real de Borbón. Restaurar una Monarquía a la que  el pueblo español había dicho “no” en unas elecciones y que fue uno de los  principales actores que provocaron la  Guerra Civil, pues no seamos ingenuos, el alzamiento militar del 18 de julio de 1936, se produjo no para que gobernaran los militares sino para restaurar  la Monarquía, luego las cosas no fueron como era de esperar, se complicó la coyuntura internacional, Segunda Guerra Mundial, Guerra Fría, etc, y España tuvo que sufrir casi 40 años una dictadura militar. El segundo, fue legalizar al Partido Comunista; legalizar un comunismo cuyas acciones violentas durante la Segunda República habían justificado de sobre el levantamiento militar del 36.  Y el tercero, más reciente, volver a meter a los militares en política, dándoles voz en el Congreso de los Diputados creando Vox, un partido antieuropeo, heredero ideológico de aquellos que provocaron la Segunda Guerra Mundial, Nazismo y Fascismo.


En estos momentos nos encontramos amenazados por dos claros enemigos. La democracia española y por tanto la sociedad española se encuentra amenazada por dos peligrosos enemigos; uno exterior, Unidas Podemos, la representación en España del comunismo internacional;  y el otro Vox, la voz de los militares. En Italia, el Movimiento 5 Estrellas, la representación del comunismo internacional en ese país, gobierna en coalición con la Liga Norte, un partido heredero ideológico del Fascismo italiano. En este momento la Fiscalía de Milán, investiga a la  Liga Norte por haber recibido financiación de empresas rusas, es decir, los extremos del espectro ideológico político, comunistas liderados desde Moscú, y Fascistas, se están apoyando mutuamente para lograr acceder al poder utilizando el sistema democrático. En España hay también claros indicios de  vínculos entre Podemos y Vox. Ambos partidos han recibido apoyo del Grupo Planeta, un grupo mediático monárquico y con fuertes vínculos con la Conferencia Episcopal Española. Ambos partidos han crecido en votos en zonas en las que ha caído el PP, es decir, están recibiendo votos de sectores de la derecha española. Ambos partidos han recibido financiación de grupos iraníes. Y lo más descarado, en ambos partidos los militares han metido generales retirados. Todo da a entender, que primero los militares atacaron la política contribuyendo a crear Podemos, metiendo al general Julio Rodríguez como uno de sus principales dirigentes.  Teniendo en cuenta cómo funcionan la Fuerzas Armadas Españolas, no es creíble que un militar con las ideas de Podemos haya podido llegar a ser JEMAD y tener acceso a información clasificada de la NATO. La única  explicación posible es la existencia de fuertes vínculos entre la derecha monárquica que controla las Fuerzas Armadas y la representación del comunismo internacional en España, Podemos. Tal vez, cuando se produjo el asunto de la perdida de la mochila con un millón de euros de fondos reservados en Somalia, caso Alakrana, el ex JEMAD Rodríguez, que dirigió la operación,  ya estaba pensando en la creación de Podemos.

En mi opinión, el presidente Sánchez ha acertado al decir que un personaje como Pablo Iglesias no puede estar en el Gobierno de España. Pablo Iglesias está en la nómina del Gobierno de Irán, haciendo propaganda política a través de cadena de televisión iraní Hispan tv. Que Pablo Iglesias pida dirigir el CNI o algún ministerio con acceso a información clasificada como secreta es de risa. Ello podría provocar que España fuera expulsada de muchos foros internacionales, por ejemplo, de reuniones de la  NATO, claro que, también es cierto que  ahí está Italia con un Gobierno de coalición de comunistas y fascistas, no sé si los italianos durante las reuniones hacen el café en la NATO o si tal vez sus estados miembros ya no comparten información clasificada. No solo eso, como humilde ciudadano español, no creo que la actividad que realiza el secretario general de Podemos en la cadena Hispan tv, propaganda política a favor del Gobierno de Irán, sea compatible con su condición de diputado nacional. Pero lo más grave,  la amenaza más peligrosa no es Podemos, de forma clara identificado como un enemigo exterior, identificado como un Prestige que amenaza toda España, sino Vox. Vox es la “voz” de los militares, y sus entornos, claro. Los dirigentes de Vox hasta ahora hablaban desde dentro del PP, pedían de forma clara el voto para el PP,  pero han tomado forma propia para poder amenazar con mayor intensidad y descaro, y evidentemente también poder embolsarse algo, como ya han hecho recibiendo de forma indecente financiación de grupos iraníes. Vox, es heredero ideológico de aquellos que provocaron la Segunda Guerra Mundial, Nazismo y Fascismo, su ideología se resume a considerar la democracia el gobierno de los débiles y ser partidarios de  la violencia como el  principal instrumento para acceder al poder, algo lógico teniendo en cuenta que tienen el apoyo de la fuerza del Estado, de los militares. A nivel europeo, son de esos partidos que quieren llevar a Europa a una situación en la que primen valores y principios previos a la Segunda Guerra Mundial.

La situación de la política española vuelve a ser muy grave. No es que hasta ahora no hubiera problemas, el régimen del 78 se ha ido degradando ideológicamente con el paso del tiempo, y sobre todo con la llegada al poder del expresidente Aznar en el 96, convirtiéndose España en una tiranía, en la que se cometen flagrantes y sistemáticas violaciones de los derechos humanos. Represión judicial, detenciones ilegales, terrorismo de Estado,  abusos médicos, la degradación de la democracia española es tal, que incluso da la impresión de que los militares han vuelto a controlar  la comida, coincidiendo ello con la llegada de Vox, teniendo estos poder para distribuir  alimentos y bebidas conteniendo sustancias nocivas para la salud, todo ello contando con la complicidad de las empresas que los envasan. Es evidente, que en la política española, o mejor dicho, en las elites dirigentes españolas, pues la casta política solo es su cara visible,  se ha producido un negativo relevo generacional. Ya no se conforman con que uno se aparte, ya no se conforman con tener poder, buscan de forma clara  la confrontación.  Tal vez están buscando lo que las elites dirigentes de la dictadura militar  lograron evitar durante la Segunda Guerra Mundial, un conflicto que permita que España sea ahora invadida por los aliados.