martes, 17 de agosto de 2021

LAS ACTUALES ELITES DIRIGENTES OCCIDENTALES DEVUELVEN EL PODER A LOS TALIBANES.

El 11 de septiembre del 2001 se produjo el mayor ataque del terrorismo islamista contra Occidente, destruyendo las dos torres del World Trade Center de Nueva York y golpeando el Pentágono, causando miles de muertos. Los ataques fueron realizados utilizado cuatro aviones que de forma inexplicable los terroristas habían logrado secuestrar en el aeropuerto de Boston. Como primera consecuencia el entonces presidente de los Estados Unidos declaro la guerra al Régimen talibán, al Emirato Islámico de Afganistán, que se consideraba que daba apoyo a los supuestos responsables, la organización terrorista, Al Qaeda y donde se creía que se escondía su líder, Osama bin Laden. Las Fuerzas Armadas invadieron Afganistán, cerrando pactos con grupos armados locales, integrados en lo que se denominó la Alianza del Norte, para derrotar a los talibanes y dar caza al líder de Al Qaeda. En el 2011 la Administración Obama hizo público que había localizado a Bin Landen en Paquistán y muriendo en su captura, su cuerpo fue arrojado al mar para que no se pudiera identificar su cadáver. Pero hoy, a poco de cumplirse 20 años de los trágicos sucesos del 11-S, de forma inexplicable los talibanes han recuperado el poder en Afganistán.  

La Operación Libertad Duradera, liderada principalmente por Estados Unidos y el Reino Unido, y a la que sin solicitarlo el Gobierno estadounidense se sumaron otros miembros de la OTAN, autoactivando el artículo 5º de Tratado del Atlántico Norte, fue un completo éxito, en pocos meses, en diciembre del 200, los talibanes habían sido derrotados y Estados Unidos coloco como presidente a Abd El Hamid Karzai, en contra del deseo de varios países de la OTAN querían restaurar la monarquía, alegando que Karzai había luchado contra los talibanes, cosa que no había hecho la monarquía representada por Mohammed Zahir Shah,  exiliado en Italia. En el 2003 la OTAN tomo el mando de las operaciones militares en Afganistán, encuadradas en lo que se denominó Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad, desde entonces la situación ha ido cada vez a peor, debido a que las fuerzas de la OTAN, únicamente preocupadas por su imagen internacional, se oponían a combatir a los talibanes buscando su integración en el Gobierno de Afganistán. Durante 20 años la principal misión de los militares de las unidades de la OTAN desplegadas en Afganistán ha sido enriquecerse a través de dietas y dinero destinado para la reconstrucción del país, realizando algunos proyectos de reconstrucción para justificar su presencia en el país. Hasta hoy, que han acabado por entregar el poder al fundamentalismo islámico.

Ayer  el presidente Biden compareció ante el pueblo estadounidense para justificar su huida de Afganistán alegando que había ordenado la retirada de las Fuerzas Armadas estadounidenses porque los militares afganos no estaban dispuestos a luchar por defender su país, y los soldados estadounidenses no debían morir por ello. Vergonzosa declaración. Primero, porque en el mundo hay dictaduras, regímenes autoritarios, como fue la Alemania nazi, como lo son los régimenes comunistas  de Corea del Norte, de Bielorrusia, de Cuba, etc, porque los débiles no pueden luchar contra sus opresores. En segundo lugar, porque las Fuerzas Armadas estadounidenses no fueron a Afganistán a apoyar a ningún clan o grupo político, sino a derrotar a los talibanes, cómplices de la masacre del 11-S, y hoy les devuelven el poder. Después de la Segunda Guerra Mundial, como consecuencia de la Guerra Fría, Estados Unidos no tuvo escrúpulos a la hora de aliarse con todo tipo de actores para lograr sus objetivos, por ejemplo, apoyo a duras dictaduras militares que se establecieron tanto en Sudamérica como en Centroamérica, pero lo ocurrido en Afganistán sobrepasa todo lo anterior, teniendo difícil explicación. Primero, porque los talibanes fueron considerados responsables del 11-S. En segundo lugar, porque 20 años después a pesar de ser los talibanes un equipo de Riad,  recuperan el poder apoyados por Rusia, China e Irán, es decir, por el comunismo internacional, todavía hoy liderado por Moscú, y en España formando parte del Gobierno, representado  por Unidas Podemos.

Por mucho que nos cuenten y difundan los medios de comunicación, es imposible que los talibanes careciendo de fuerza aérea, con mínimo armamento pesado y medios de transporte principalmente de uso civil, se hayan hecho con el control de Afganistán en cuestión de días. Como no es creíble que las Fuerzas Armadas estadounidenses, con mayor presupuesto del mundo, tengan que huir del territorio de un país sin ni siquiera combatir mínimamente. El presidente Biden ha adoptado una postura cobarde en Afganistán, permitiendo que su país sea humillado. Evidentemente, el comportamiento de la OTAN ha sido el de esperar. Con fuertes divisiones internas que anulan su capacidad operativa; nunca partidaria de combatir contra los talibanes, su retirada es lógica aunque ello suponga poner en evidencia su debilidad, la decadencia de la Unión Europea y su irrelevancia internacional.

Que los talibanes se hayan hecho con el Gobierno de Afganistán incluso antes de que los militares estadounidenses abandonaran completamente el país, sin que el Pentágono ordenara ningún ataque para frenar su avance, solo tiene una explicación, lo ocurrido se parece  mucho a la Primavera de Praga, cuando Occidente, o sea, NATO, permitió que la Unión Soviética se hiciera con el control de Checoslovaquia, es decir, da la impresión de que han pactado la entrega de Afganistán a Arabia Saudí, pues todo el mundo sabe que los talibanes son un equipo de Riad, tal vez, a cambio de cosas como el reconocimiento de Israel por algunos países islámicos. Ya veremos qué pasa. Pero lo más llamativo de todo es que Rusia, China e incluso Irán, estén apoyando a los talibanes. Da la impresión de que la coyuntura internacional está cambiando y el ateo comunismo internacional se ha aliado con el mundo islámico. Pero sin duda, de lo que está ocurriendo en Afganistán solo hay un responsable, la OTAN, que tomo el control de las operaciones militares en el 2003 y desde entonces ha estado de forma soterrada apoyando que los talibanes recuperaran el poder; la OTAN debería disolverse ya. Evidentemente, lo ocurrido también pone de relieve cambios en la política exterior estadounidense. El actual Partido Demócrata está sometido al chantaje de minorías culturales, y ello hace que tenga una política exterior menos intervencionista, lo que va a perjudicar a muchos pueblos que son objeto de represión por regímenes totalitarios. Biden imponiendo una cobarde huida de sus militares de Afganistán, humillando de forma innecesaria a su país, es de prever que va a provocar el hundimiento del Partido Demócrata en próximos procesos electorales. Pensar que la humillante huida del Ejército estadounidense no tendrá consecuencias, como se dice ahora, globales, es un error. Después del 11-S vino la crisis económica del 2008 y Reino Unido abandono la UE. Es de esperar que se produzcan consecuencias de igual nivel o superior. Por otro lado, la desestabilización de Afganistán hace prever que millones de inmigrantes se desplacen hacia territorios de la UE apoyados por Rusia y Turquía. ¿Qué hará entonces Alemania, los acogerá, o intentara imponer otra vez una política de cupos de reparto de inmigrantes y refugiados, ya rechazada en el pasado por muchos estados miembros?


domingo, 8 de agosto de 2021

“PRIVACION DE DERECHOS DE HUMILDES CIUDADANOS” PRINCIPAL LEMA DE LA ACTUAL UE.

Las elites dirigentes de la actual Unión Europa (UE) no dejan de sorprender, con su sutil intención de privar a los ciudadanos de derechos. Hace tiempo que muchos ciudadanos de Estados miembros ven pisoteados sus derechos de forma sutil, por ejemplo, en España, donde muchos ciudadanos son privados del derecho a la justicia, anulándose el Estado de Derecho, perdiendo en sus actuaciones independencia e imparcialidad el Poder Judicial español, haciendo que la UE sea todo menos un espacio de seguridad, libertad y justicia. Ahora ha sido con la implantación del certificado covid. La UE no fue capaz de aprobar una Constitución Europea, lo cual crearía una ciudadanía europea, dotando a todos los ciudadanos de los Estados miembros de un documento de identidad común, pero ahora intenta imponer un documento de identificación común basado en el certificado covid y archivado en una base de datos que nace como europea pero de clara tendencia a convertirse en una base de datos de acceso universal.

La UE ha sido el único ente de naturaleza política que ha puesto en marcha el certificado covid, por ejemplo, Estados Unidos no ha impuesto un documento similar para regular la movilidad entre los 52 Estados que lo forman. Cuando se elaboró el proyecto, los dirigentes de la UE garantizaron que el certificado covid solo se utilizaría para facilitar la movilidad entre Estados miembros,  pero era falso, está siendo utilizada para privar a los ciudadanos de derechos; no solo a los no vacunados del derecho a la libertad de movilidad, sino de todos a su privacidad. Además, todo apunta que intentan unir las bases de datos de certificados covid para crear una base de datos de personas, en principio, europea, en la que dicen que solo existirían datos relacionados con el covid, pero en la cual sería muy fácil incluir de forma clara o encriptada otro tipo de datos. Una base de datos  europea, pero con aspiraciones a convertirse en una base de datos de acceso universal, a la que se podrán unir todos los países que tengan a nivel nacional implantado el certificado covid. Un certificado covid, cuya principal característica es la ambigüedad, dejando abierta la puerta de forma sutil a medidas represivas por parte de las autoridades de los Estados miembros. Por ejemplo, dice “Los titulares de un certificado COVID digital de la UE válido, en principio, no deben someterse a pruebas o cuarentena al viajar dentro de la UE”. “En principio”,  cual es interpretado por las autoridades sanitarias españolas como el derecho a someter a seguimiento a todo contacto estrecho vacunado, sometiéndolo a pruebas PCR, etc. No deja de ser curioso que en Reino Unido se haya optado por algo tan de la UE como el certificado covid. Curiosamente, su primer ministro, Boris Johnson, que ya ha pasado la enfermedad y ha recibido la pauta completa de vacunación se ha sometido una  cuarentena de diez días después de tener un contacto estrecho con un contagiado, algo insólito, sin explicación científica, pues si el no está inmunizado ¿Quién lo está y para qué sirven las vacunas?, algo realizado para justificar medidas represivas de autoridades sanitarias de su país.

Invasión del derecho a la privacidad, por ejemplo, en muchos Estados miembros se quiere legalizar que para realizar determinado tipo de actividades, como comer en un restaurante o tomar un copa en un pub, etc,  uno tenga que identificarse previamente ante el personal del local con su certificado covid, el cual recogerá sus datos. Es cierto, que cuando una persona paga con tarjeta bancaria el personal del local ya accede a su identidad, pero únicamente de la persona que paga, no de sus acompañantes; y accede a un número muy pequeño de datos, y no a una base en la que no sabemos qué datos realmente puede haber, teniendo siempre la opción de elegir poder pagar en efectivo.

La autoridades de la UE dicen que la implantación del certificado covid ha favorecido la movilidad entre Estados miembros en la actual situación de epidemia covid, es posible, no sabemos qué hubiera ocurrido de no existir, seguramente la movilidad, en concreto el turismo, se hubiera incrementado de igual forma. Lo que sí está claro es que las medidas adoptadas por la UE han favorecido la propagación de nuevas variantes del virus, identificado sus orígenes en terceros países, principalmente, Sudáfrica, India y Brasil. Es decir, el certificado covid sirve para controlar a los ciudadanos europeos creando un falso clima de seguridad frente al covid, permitiendo que el virus, constatadas nuevas variantes,  se muevan con total libertad de terceros países hacia Estados miembros de la UE y entre estos. Es evidente, la epidemia covid está siendo utilizada a nivel europeo para justificar represión y encubrir violaciones de los derechos humanos, la única duda, es cuanto más aguantaran los ciudadanos de forma resignada y pacífica la privación de seguridad, libertad y justicia.